Ingresé a trabajar en el Gobierno de la Presidenta Bachelet una semana antes de que ganara, segura de que sería la primera mujer socialista que llegara a La Moneda. Me fui a trabajar a la Subtel. Durante ese tiempo me toco vice coordinar y coordinar luego Coordinación Nacional de Infocentros, grupo en el que participaban múltiples sectores del Estado y del tercer sector. Este grupo sumado a otros actores formaron parte de las mesas de trabajo con quienes se escribió la Estrategia Digital 2007-2012 En lo personal mi acercamiento al tema ha estado focalizado en TIC y participación ciudadana, principalmente en sectores vulnerables y también en los temas de software libre. Paliamos, luchamos e hicimos todo lo que estaba a nuestro alcance para que las TIC en Chile no solo fueran una herramienta para el emprendimiento y la productividad. No fuimos pocos los que buscamos todos los caminos poner temas en la estrategia, hasta ese momento ausentes y no quedamos completamente contentos. Soy bacheletista, pero la lealtad a un gobierno es justamente buscar los mecanismos para hacer ver los vacíos y las omisiones, fue así que junto con mis compañero de ruta organizáramos un encuentro ciudadano para poder revertir los vacíos en la estrategia y logramos redactar un documento, el decreto 550 que fue aprobado por el Congreso, para instalar en el Estado los temas que quedaron ausentes.
Esta semana Alfredo Barriga dejó la Secretaría de Desarrollo Digital, lugar en el cual se instaló y a poco tiempo el gobierno que arrogante y grandilocuente prometía “esta vez” hacerlo bien , lo envestía de CIO.
La comunidad TIC, hasta yo, vi en aquello una tremenda señal de respaldo de la autoridad. Mi jefa Puppy Rojas era amiga de Barriga, ambos fueron parte del grupo Tantauco y ella, con la misma arrogancia llegó a Subtel diciendo y repitiendo hasta la saciedad que “ahora las cosas se harían como se debían hacer, NO como antes”.
Se jactaba diciendo que había conversado con Alfredo y ella estimaba que en un año podría conectar todas las escuelas de Chile a internet: no sabía, no tenía idea, no podía imaginar siquiera como funciona el Estado. La complejidades jurídicas en pos de la transparencia de los procesos y la redacción de bases que permitan asegurar que la inversión del Estado va a ser impecable lleva meses, más aun cuando se transferirán millones de dólares al sector privado como subsidio. No era capricho de la bancada concertacionista, hasta los funcionarios de derecha se lo hicieron saber. La división se lo dijo, se le explicó en todos los tonos: no creyó, “nuestra ineficiencia crónica” nos impedía ver las “oportunidades” de tener buenos vínculos en el sector privado.
El señor Barriga a pesar de haberse instalado como el “señorito” que todo va a cambiar, se dió cuenta de lo mismo que se dieron cuenta sus antecesores: la estrategia digital TIC no es prioridad, objetivamente no lo fue antes y, definitivamente ahora, tampoco lo fue, a pesar de su pomposa investidura de CIO, título nobiliario que de poco sirvió: no estuvo más cerca de Piñera, no pudo incidir, nada impactó. Ninguneo la experiencia del equipo, no escuchó los consejos de los antiguos secretarios, no consiguió nuevos recursos, desecho las platas del BID.
Como bien lo señala Jorge Arce en el posteo que hizo a la columna del blog de Barriga sus antecesores, a pesar de enfrentar una realidad hostil, se esforzaron por generar alianzas para sacar adelante el trabajo, mal que mal se vincularon con organizaciones de la sociedad civil, sacaron adelantes proyectos BID, tenían visión, lograban establecer estrategias, sin hacer alardes exitistas, conscientes de no ser “la linda de la fiesta”, trabajando con su equipo de excelencia, el mismo al que Barriga con suerte saludaba cuando entraba a la oficina. Cómo se puede confiar en que alguien hará redes si ni siquiera las genera con su equipo de trabajo?
Puedo no haber estado de acuerdo con al gestión anterior, puedo incluso haber tenido roces y diferencias con quienes antes ocuparon su puesto, pero la pobre gestión de Barriga es claramente un retroceso, que se cayó con todos los estertores que acompañan la caída de los que prometen y alardean que harán algo que no pueden cumplir.
En abril se realizó en se realizó en Chile el encuentro mundial de telecentros organizado por la organización mundial más grande que los reúne: www.telecentre.org. Se eligió Chile como sede, entre otras cosas porque el modelo de apropiación social de TIC diseñado por SUBTEL en el gobierno de la Presidenta Bachelet quedó seleccionado entre las 18 mejores iniciativas en los E-Indian Awards 2010.
Dicha iniciativa no pudo continuar en la selección final del concurso pues Puppy Rojas jefa de división de Subtel me pidió que retirará el proyecto del concurso. A dicho encuentro vino el Ministro de Telecomunicaciones y Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) de Filipinas, Ivan Uy Endrile de Filipinas, sede en que funciona Telecentre.org. El encuentro finalizó con la “Declaración Chile” que tiene por objetivo propulsar campañas de trabajo focalizado en TIC con mujeres de sectores vulnerables de todo el mundo. El señor Barriga fue al inicio del evento, pero el Gobierno de Chile NO firmó, la Declaración Chile, paradójico por decirlo menos.
El ministro de Filipinas, Ivan Uy Endrile me preguntaba a mí: "Erika, ¿por qué en un encuentro mundial de telecentros su gobierno no participa?¿Acaso en Chile no hay mujeres excluidas del mundo de las TIC?" No sabía que responder.
La SUBTEL no asistió. No solo eso, SUBTEL además impidió que una operadora de los telecentros, que había sido seleccionada para relatar la experiencia del rol de los telecentros en el terremoto, participara en la presentación de un estudio realizado con la Universidad de Washington. También permitió que sus operadores de telecentros asistieran solo unas horas al seminario.
Barriga dice que hizo todo lo que pudo pero no fue suficiente, no dejó sello alguno, solo buenas intenciones. Puppy Rojas, su amiga personal, quien también participó con el en el grupo Tantauco, nada bueno dejó en SUBTEL: estrés colectivo, pasos erráticos, despidió a quienes no nos quedamos callados, enfermó de apnea producto del estrés a uno de los mejores ingenieros que tiene la SUBTEL.
Poco y nada hizo Puppy Rojas para defender a la Red de Telecentros del programa Quiero Mi Barrio. Acusó a la UFRO, universidad ejecutora del proyecto, a la Contraloría, sin pruebas y obviamente sin resultados. Retrasó todos los procesos, dilató el estudio de línea base, lo que claramente dificultará poder medir impacto
Esto produce que el proyecto, a pesar de ser bien evaluado en los barrios e incluso por gente del Minvu tenga pocas posibilidades de continuar. Revise el sitio de Subtel: no le parece extraño que el proyecto no tenga un sitio? Qué no muestre lo que hace? Qué no ponga la enorme tasa de capacitados que tiene? No le parece extraño que no se luzcan mostrando los altos índices de uso de gobierno electrónico que tienen ahora los vecinos? Tampoco muestran la alianza que se estableció con Intel para capacitar y supervisar procesos de formación a costo cero para el Estado. Sobre el proyecto solo podrá encontrar esto , un formulario de rendición, ah! y una carta en la que dicen que yo ya soy funcionaria. Patético.
Ojalá uno solo pudiera solo sentir rabia, pero es el Estado de Chile, mi Estado y solo por eso además de la rabia no me queda otra que guardar la esperanza de que esto se revierta, pues la mala gestión afecta a miles de familia, a un país completo.
Erika Silva Urbano
Ex funcionaria de la Subsecretaría de Telecomunicaciones
Estudiante de Magíster en Gobierno y Gerencia Públicade la Universidad de Chile
